* Las parejas se comprometen e invierten mucho tiempo y dinero planeando la ceremonia, pero no hacen casi ningún esfuerzo por prepararse para vivir el matrimonio.
Las bodas son un buen negocio, pero no son el objetivo del matrimonio. Hemos visto a muchas parejas tener una boda de ensueño tan solo para lamentar un horrible matrimonio. La cuestión es que la boda dura un solo día pero el matrimonio debe durar toda la vida. Por lo tanto, asegúrate de planear tu vida para mucho mas que solo la fiesta de un día. Puedes encontrar bastante material en línea para orientar a los novios antes de casarse.
*Considerar el matrimonio como un contrato envez de una alizanza
Dios creó el matrimonio para ser mucho más que eso, lo creó para ser una alizana. En una alizana lo que importa, no son los intereses propios, sino los intereses de otra persona. Es un acuerdo desinteresado, eterno, sin salida ni "plan B". Esta es la única manera en que realmente puede funcionar un matrimonio, pero desafortunadamente nuesetro mundo moderno ya no lo considera así.
*Construimos nuestro matrimonio en base a sentimientos, en lugar de compromisos.
El matrimonio es demasiado importante para basarlo en sentimientos. Por lo contrario, debemos construir nuestro matrimonio en compromiso para resistir esos días en que no setimos nada. Nuestro mundo moderno adora los sentimientos y es muy fácil renunciar a un matrimonio en el momento en que los sentimientos cambian. Las parejas más fuertes son aquiellas que han aprendido que el matrimonio requiere decidir amarse uno al otro incluso en esos días en que es difícil aceptarse o quererse.
*Considerar que el matrimonio es una asociación.
El matrimonio claro está, es una asociación. Pero en nuestro mundo moderno, hemos dividido todo en -suyo- y -mio- , de una manera muy peligrosa. Cuando visualizamos al matrimonio un "50-50", siempre estaremos llevando record de cuanto se recibe y quién se esfuerza más o menos, por lo general nuestro dar, lo calificamos siempre mejor que el de nuestra pareja. Estaremos tentados a dar menos en la manera en que lo hagamos parejo. Eso eventualmente lleva a un resentimiento que reemplaza al amor, ya que ninguno quiere dar mas de lo que le corresponde.
*Consideramos que la felicidad de nuestro hijos, debe de estar encima de la salud de nuestro matrimonio.
No es nuestro trabajo el criar hijos felices, sino criar adultos responsables. Cuando nos enfocamos a sus felicidad temporal, acabamos haciéndoles daño a ellos y a nuestro matrimonio al mismo tiempo. Cuando se van, acabamos con un nido vacío y un matrimonio igual de vacío.
Uno de los más grandes regalos que puedes dar a tus hijos es la seguridad de crecer en un hogar en donde hay unidad entre mamá y papá, en donde pueden verlos amorosos y comprometidos el uno al otro.
*Texteamos mas que hablamos
Muy frecuentemente podemos estar juntos en un mismo cuarto, pero cada quien es diferentes mundos. Los matrimonios modernos pueden beneficiarse mucho si pasamos menos tiempo con la tecnología y más tiempo personal con los que amamos. Todos podemos obtener gran provecho por escribir menos y dialogar más.
*Hemos buscando el sexo y el romance en el exterior.
Uno de los más grandes problemas y más daño hace a los matrimonios, es el que este mundo moderno el esposo y la esposa han dejado de conquistarse el uno al otro y han optado por cultivar sus fantasías sexuales y románticas en fuentes externas como la pornografía, literatura erótica y novelas románticas.
*Pensamos que el Divocio resolvera todos nuestro problemas.
En vez de decidir darse por vencidos en el momento en que surgen las dificultades, vayamos resolviendo los asuntos, creando soluciones, en vez de crear excusas. Luchemos siempre por un nosotros en vez de luchar el uno contra otro.
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